Título: Bailando con el diablo.
Autor: Sherrilyn Kenyon
Serie: Cazadores Oscuros 04
Género: Romántica paranormal adulta.
SINOPSIS:“Dance with the Devil” nos cuenta la historia del Cazador Oscuro Zarek de Moesia y Astrid.
Zarek es un Cazador Oscuro tosco y bruto hasta límites insospechados… lo que por otro lado es lógico, ya que se ha pasado los últimos novecientos años viviendo aislado de todo el mundo, incluso de los de su especie, en un lugar perdido en Alaska. Nadie quiere saber nada de él y es temido por muchos. Ha sido castigado por Artemisa, confinándolo en ese maldito lugar cuando, siglos atrás, destruyó el pueblo que tenía a su cargo sin mostrar un ápice de compasión… o eso creen todos, incluso él mismo.
Su vida como humano fue aún peor. Nació, vivió y murió como esclavo, pero no como cualquier esclavo… sino como el más humillado, vilipendiado y torturado de los esclavos. Hijo de una esclava griega y de un senador romano, su madre le repudió, su padre y sus hermanastros lo usaron como chivo expiatorio de sus crueldades. Nadie sintió compasión por él, nunca tuvo amigos, nunca el más mínimo sentimiento de afecto…
Su existencia, tanto como humano como Cazador Oscuro, se puede resumir en una sola palabra: SOLEDAD.
En el comienzo del libro Zarek está de regreso a Alaska, con sus sueños de nuevo rotos. Le habían enviado a Nueva Orleáns, para ayudar a los Cazadores de aquella zona durante la fiesta de Mardi Gras. Como os podéis imaginar, Zarek, después de tantos siglos viviendo en una tierra árida y sin ninguna compañía, llega a tener cierta esperanza de que le dejen permanecer en aquel lugar bullicioso, lleno de gente y con un clima cálido que hace que sus huesos no estén en un constante peligro de congelamiento. Pero como siempre ha pasado en su triste vida, sus esperanzas terminan haciéndose trizas. Por ayudar a Sunshine, la compañera de Talon, regresa de nuevo a su odiado hogar pero en circunstancias peores… se ha ganado el odio del Dios Dionisio y ha sido culpado del asesinato de unos policías. Si hay algo en su vida como Cazador que tiene muy claro es que no se puede salir ileso de la ira de los Dioses… así que Zarek está convencido que le quedan pocos días de vida. Y sus pensamientos no van mal encaminados…
Artemisa está furiosa, quiere destruir a Zarek de una vez por todas. Pero Acheron intercede a favor del protagonista, sólo si es hallado culpable en un juicio conforme a las reglas del Olimpo, aceptará su muerte.
La elegida para juzgar a Zarek es la ninfa Astrid, hija de la Diosa Griega de la Justicia Themis y hermana de las tres “Destinos”.
Astrid siente un enorme vacío en su vida. Nunca, en todos los años que ha juzgado a humanos y Cazadores, ha hallado un inocente… todos culpables. Sufrió una gran decepción con un Cazador que la embaucó en busca de su inocencia y que casi terminó por matarla. No quiere volver a juzgar a nadie. Pero esta vez es distinto, ya que es el mismísimo Acheron quien le pide su ayuda. Así que termina por aceptar el encargo.
Y es en este punto cuando los dos se encuentran. ¿Podrá Zarek volver a confiar en alguien después de la espantosa vida que ha llevado?, ¿habrá algo más que odio y brutalidad en el corazón de Zarek?, ¿volverá Astrid a recuperar su fe en la bondad de las personas?... Las respuestas ya sabéis dónde podéis encontrarlas.
(Info Autoras en la Sombra)
Zarek es un Cazador Oscuro tosco y bruto hasta límites insospechados… lo que por otro lado es lógico, ya que se ha pasado los últimos novecientos años viviendo aislado de todo el mundo, incluso de los de su especie, en un lugar perdido en Alaska. Nadie quiere saber nada de él y es temido por muchos. Ha sido castigado por Artemisa, confinándolo en ese maldito lugar cuando, siglos atrás, destruyó el pueblo que tenía a su cargo sin mostrar un ápice de compasión… o eso creen todos, incluso él mismo.
Su vida como humano fue aún peor. Nació, vivió y murió como esclavo, pero no como cualquier esclavo… sino como el más humillado, vilipendiado y torturado de los esclavos. Hijo de una esclava griega y de un senador romano, su madre le repudió, su padre y sus hermanastros lo usaron como chivo expiatorio de sus crueldades. Nadie sintió compasión por él, nunca tuvo amigos, nunca el más mínimo sentimiento de afecto…
Su existencia, tanto como humano como Cazador Oscuro, se puede resumir en una sola palabra: SOLEDAD.
En el comienzo del libro Zarek está de regreso a Alaska, con sus sueños de nuevo rotos. Le habían enviado a Nueva Orleáns, para ayudar a los Cazadores de aquella zona durante la fiesta de Mardi Gras. Como os podéis imaginar, Zarek, después de tantos siglos viviendo en una tierra árida y sin ninguna compañía, llega a tener cierta esperanza de que le dejen permanecer en aquel lugar bullicioso, lleno de gente y con un clima cálido que hace que sus huesos no estén en un constante peligro de congelamiento. Pero como siempre ha pasado en su triste vida, sus esperanzas terminan haciéndose trizas. Por ayudar a Sunshine, la compañera de Talon, regresa de nuevo a su odiado hogar pero en circunstancias peores… se ha ganado el odio del Dios Dionisio y ha sido culpado del asesinato de unos policías. Si hay algo en su vida como Cazador que tiene muy claro es que no se puede salir ileso de la ira de los Dioses… así que Zarek está convencido que le quedan pocos días de vida. Y sus pensamientos no van mal encaminados…
Artemisa está furiosa, quiere destruir a Zarek de una vez por todas. Pero Acheron intercede a favor del protagonista, sólo si es hallado culpable en un juicio conforme a las reglas del Olimpo, aceptará su muerte.
La elegida para juzgar a Zarek es la ninfa Astrid, hija de la Diosa Griega de la Justicia Themis y hermana de las tres “Destinos”.
Astrid siente un enorme vacío en su vida. Nunca, en todos los años que ha juzgado a humanos y Cazadores, ha hallado un inocente… todos culpables. Sufrió una gran decepción con un Cazador que la embaucó en busca de su inocencia y que casi terminó por matarla. No quiere volver a juzgar a nadie. Pero esta vez es distinto, ya que es el mismísimo Acheron quien le pide su ayuda. Así que termina por aceptar el encargo.
Y es en este punto cuando los dos se encuentran. ¿Podrá Zarek volver a confiar en alguien después de la espantosa vida que ha llevado?, ¿habrá algo más que odio y brutalidad en el corazón de Zarek?, ¿volverá Astrid a recuperar su fe en la bondad de las personas?... Las respuestas ya sabéis dónde podéis encontrarlas.
(Info Autoras en la Sombra)
OPINION PERSONAL:
Zarek de Moesia es el personaje típico en el cual se reflejan las principales cualidades de “el malo de la película” dando paso después a un corazón maltratado bajo una piel llena de cicatrices.
Bajo mis gustos de lectura un libro ha de ser divertido, con buen ritmo y sobre todo debe de hacerme poner la piel de gallina con su lectura. Bailando con el Diablo cumple dos de tres de esas características en mi opinión.
Marca un ritmo de lectura ameno en el que es fácil integrarse con los personajes a pesar de los cambios espacio temporales debido a los sueños y realidad. El poder meterse en la mente del protagonista a través de sus sueños es realmente algo que hace fusionarse de alguna manera con el personaje, ya que en ellos se ve y se sienten los pensamientos, y los anhelos del protagonista haciendo que el lector se meta un poco más en el libro.
Sherrilyn en este libro no marcó picos de risa como en libros anteriores o futuros de la saga, pero está totalmente justificado dado que Zarek es uno de los personajes más sufridores de esta larga historia, su carácter, al venir marcado de un pasado en el que solo por mirar a los ojos era maltratado, está sujeto a dejar al lector con un pequeño regusto de amargura al leerlo.
Nota: 7
Crítica de Natalia.
Quierooo!!
ResponderEliminarMe doy cuenta que ha sido mala idea que se abrieran un blog, pues ahora me hacen anotar títulos y desear libros desde todas las direcciones!! jaja.
Chicas, les cuento que mi amigo Dre!k y yo les hemos dejado un premio en nuestro blog Letras Oscuras.
Bsos!!
Ame Bailando con el diablo! Y estoy enamorada de la saga al completo. Gracias por aconsejarme a leerla. Un saludo!
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